lunes, julio 31, 2006

«Conclusiones del mes»Reflexiones del mes de julio que pasó:

-Y mientras más cara la remera más prestada se siente.
-Mucho fútbol este mes. De hecho, ya no me duelen las piernas al día siguiente, lo cual me sorprende un poco.
-Poco blog este mes.
-Mucha novia este mes. Sí, mucha Natalí. Y la adoro. Qué más decir, la adoro.
-¿Podrían infinitos elementos compartir una misma zona de contacto? ¿Podría cada elemento de un grupo infinito de elementos estar en contacto con todos los otros infinitos elementos? ¿Podría todo tocarlo todo?
-Abandoné todas las materias de mi carrera; mañana empiezo otra vez, literalmente.
-Cambié la plantilla.
-Cada vez que me acosté en mi cama, hace tres años, debió sonar un requiem.
-Insúltame, pégame, empújame... pero no me digas eso, amor. Por favor, no me digas eso.

miércoles, julio 26, 2006

Los abrazos son muchos, pero pueden abarcar diferentes significados para quien abraza, incluso idénticos abrazos ejecutados con los mismos músculos movidos de igual manera. Quizá ni hay diferencia para el otro en los abrazos de uno, pues se reciben de igual forma, pero para mí, uno de todos esos abrazos es como el agua o el aire, algo muy necesario para vivir. De hecho, ella misma ya es una necesidad, y le tengo pánico a mi torpeza: es mi defecto más incontrolable, el primero que ella sufre y el que más aporta a la posibilidad de perderla.

viernes, julio 21, 2006

¿Qué hago?, ¡yo soy más alto que esta mierda!
¡Nicolás, ya fue, no jodas más! ¿Desde cuándo te afectan estas nimiedades? Dale, ¡si vas como trompada! Porque así... es como dejar de comer porque querés comer, no tiene sentido. Haz lo que quieras, y quien se queda atrás, atrás se queda. Esto fue demasiado lejos. Rebajarte así por saciar una ya dudosa necesidad... no encaja. ¡Se acabó esta pavada! El tronito espera que te sientes en él una vez más.

jueves, julio 20, 2006

Cada suspiro que doy es un cajón lleno más que cierro en el gran armario de la mierda acumulada.

martes, julio 18, 2006

—¡No me grites!
—¡Te grito cuanto creo necesario! ¡Sucede que en este mundo todos se guían por lo que es lindo y lo que es feo, lo que parece fuerte y lo que parece débil, pero ya a nadie le importa lo que está bien y lo que está mal! Y cuando digo algo bien con la voz tranquila, ¡nadie me escucha! Y como no eres ajeno a este mundo, ¡te lo grito fuerte para que me escuches!

jueves, julio 13, 2006

Pasen por mi casa y encontrarán un niño rendido que lo evade todo. Le hablan de pelear, pero, ¿pelear por qué? Él mismo se encargó de convertirse en un personaje innecesario; todos saben que no es confiable y se enseñaron a conseguir de otras fuentes cualquier utilidad que él haya podido ofrecer. Ya muchos lo dan por caso perdido, y otros aún se atreven a creer que tiene algo planeado, un as en la manga. Él nota que en demasiadas ocasiones ni siquiera le importa su porvenir, y cuando logra importarle evita pensar en ello.

martes, julio 11, 2006

¿Crees que fue fácil? ¿Sabes cómo se sintió estar así? ¿Sabes cómo se siente ahora, acaso? ¡Ni idea tienes de lo que fue vivir con ropa prestada bajo un techo prestado en una vida prestada! Eso es lo que fue y sigue siendo, una vida a préstamo; y no sé cómo haré para devolver todo esto. ¿Y por qué quiero devolverlo, preguntas? Por mi visión y mi consideración de ser independiente, lo cual nunca pude concretar. No me gusta pedir, pero cuando me es dado algo me obligo a actuar sumiso; es mi mejor forma de mostrar agradecimiento.

domingo, julio 09, 2006

«¡La pared, Nicolás! ¡Nos vas a estrellar en la pared!» Ella grita alarmada, asustada; no hay nada más que pueda hacer. Y la pared es más dura de mi lado.
Para dañar a alguien no me importa terminar aún más dañado que ese alguien si consigo hacerle daño. No he dejado de ser un hombre de pasión.

martes, julio 04, 2006

Estoy en la nada, o sea, como pez en el agua. Y es triste, tristísimo, un muchacho como yo torturándose así, abandonándolo todo por causas desconocidas. Pero esta es mi forma de hacer las cosas, otra vez tomando el toro por las bolas. Y está bien, mejor así que andar a medias. Algo queda claro: esta es, realmente, mi última oportunidad para hacer lo que quiero. ¡Ánimo! Todavía tengo una oportunidad y pretendo usarla. ¡Una oportunidad es mucho!

lunes, julio 03, 2006

Mi panorama sufrió un corto temblor y así mi cielo azul se tornó verde, elevándome a él. Las estrellas lejanas eran puntitos marrones que parecían moverse con hilos extraños y detrás del sol pude ver una columna temblorosa que lo elevaba. La luna no era esférica y estaba atrapada en la oscuridad más allá del verde, y las bandadas de pájaros zumbaban y volaban casi sin orden. Pude tocar el cielo con las manos; era peludo al tacto y dulce al olfato. No tardé en quedar dormido del golpe. Nunca después vi otra vez aquél cielo verde.

domingo, julio 02, 2006

—¿Dónde está Andrés? Hace rato que no lo encuentro.
—Yo tampoco. ¿Lo llamaste por teléfono a la casa?
—Sí, pero nunca hay nadie.
—¿Se habrá mudado?
—No creo. Nunca tuvo los bolsillos llenos, por decirlo así.
—¿Se habrá muerto?
—Me hubiera dicho.
—La verdad que no sé qué le puede estar pasando para desaparecer así como así. Quizá fue nuestra imaginación y el nunca existió.
—¡No! Eso es justo lo que quiere que pensemos. ¿Qué mejor modo de deshacerse de nosotras?

sábado, julio 01, 2006

La otra noche, cuando volvía a casa, imaginé una bombilla de luz gigante, en el mar, cortando la línea del horizonte. Yo me hallaba en la costa, mirando. Parecía tener el tamaño del hombre promedio y surcaba el agua en posición vertical con el bulbo hacia arriba, como si practicara algún deporte. Y así iba la bombilla, navegando sin problemas. Lo que realmente me preocupó fue el asunto de los diferentes idiomas, ya que cuando saliera del agua no sabría preguntarle cómo hizo para ser tan grande e independiente. Tal vez nunca encontró su lámpara. Tal vez yo necesitaba enormemente dormir un poco.